Para aceptar mi pérdida auditiva, tengo que dejar a un lado mis frustraciones.
Existen muchas funciones que permiten a las personas con pérdida auditiva aprovechar las ventajas de los teléfonos inteligentes. Por ejemplo, los iPhones tienen una función de conexión con los auriculares que amplifican los sonidos suaves y ajustan la frecuencia para adaptarla a la capacidad auditiva del usuario, y las aplicaciones de vídeo permiten que el lenguaje de signos se vea aunque el orador no aparezca.